jueves, 31 de mayo de 2012

Eliminación de los escudos en la villa de Bielsa.

La villa de Bielsa en la actualidad.

En el año 1801 Juan de Buerba y Bernad, infanzón, agrimensor por la Real Academia de San Luis, y vecino del lugar de Parzán, aldea de la villa de Bielsa, expuso ante la Real Audiencia de Aragón que en Bielsa hay varias familias que tienen, en las fachadas de sus casas, blasones de armas de familias infanzonas que hubo antiguamente. Hay familias que no tienen otro título que las armas que existen sobre sus puertas. Juan Buerba solicitó que se mandara presentar las pruebas documentales de infanzonía a los propietarios de las casas con escudos, y si no lo hacen se piquen (borren) sus armas, de modo que no quede carácter ni señal alguna de ellas, con apercibimiento de que pasado el plazo sin haberlo ejecutado se proceda a ello a sus expensas y a lo que haya lugar.

Según Juan Buerba, en el año 1801 no residía ningún infanzón en Bielsa. Sin embargo, había escudos en 10 casas de esta villa, y uno en la aldea de Javierre:



Propietarios de las casas con escudos de armas
1
Mosén Juan García, racionero
2
Pedro Solans, beneficiado de San Pedro
3
Josef Bernadac
4
Nicolás Mazcaray princesa
5
Josefa Villa, viuda de Mathias Solans
6
D. Joaquín Antonio Fernández
7
Antonio Zueras
8
Pedro De Antonio Cano
9
Pedro Lerín
10
Casal que fue de Antonio Berastegui y lo posee el referido Joaquín Fernández
11
Francisco Laguna, de la aldea de Javierre

Juan Buerba  dijo que “existen sobre sus respectivas puertas blasones de armas de familias infanzonas que hubo en lo antiguo y se han extinguido y otras han emigrado de la población. Sus casas han ido a parar a los que la poseen en el día y que nada tienen que ver con dichas armas. De mantenerlas públicas, con el tiempo se puede provocar perjuicio a la regalía y a los que son notorios y verdaderos infanzones”.

En octubre de 1801, en la Real Audiencia se dictó un auto por el cual se obligaba a los habitadores y poseedores de las casas de la villa de Bielsa que tuviesen armas en sus puertas, presenten en este tribunal, en el plazo de dos meses, los correspondientes títulos justificativos de infanzonía y de pertenencia de las Armas colocadas en ellas, con apercibimiento  de que pasado el plazo sin haberlo hecho se procederá a lo que haya lugar. En enero de 1802 el ayuntamiento de Bielsa quedó enterado del mencionado auto, firmando Blas Escalona, alcalde primero y juez ordinario de la Villa de Bielsa y sus aldeas. También se notificó la resolución a los propietarios de las casas que poseían escudo de armas. Finalmente, el plazo para presentar los títulos justificativos fue ampliado en siete meses.

En octubre de 1802, al no haber presentado los propietarios demandados la justificación documental de su infanzonía, el demandante instó a que se procediera a picar los escudos de armas. El fiscal de S.M., el día 29 del mismo mes, dispuso que se nombrara un comisionado para picar los escudos de armas, se especifique la inscripción, cuarteles y divisas que tuviere cada escudo para que siempre conste y que los gastos de todo sean a costa de los vecinos en cuyas casas existen los escudos, por haberlos tenido que quitar porque no son blasones suyos. Todo ello fue notificado al ayuntamiento y a los vecinos afectados. La mayor parte de los vecinos, el 14 de diciembre, afirmaron que no eran infanzones, ni tenían documentos que acreditasen que lo hubieran sido sus ascendientes, y por ello habían picado los blasones que estaban sobre la puerta de sus casas, sin que quedase señal de que las hubiera habido. No tenían derecho para mantenerlas públicas. Hubo tres afectados que no cumplieron el mandato de la Real Audiencia: Antonio Zueras, Joaquín Fernández y Francisco Laguna.

En 1803 siguió el proceso contra los tres vecinos reticentes al picado de sus escudos. En octubre, en presencia del Sr. D. Ramón Bielsa, alcalde segundo del lugar de Gistaín y juez de la Comisión, se procedió a inspeccionar las fachadas de la casa de D. Joaquín Fernández. No se advertían vestigios de armas, aunque sobre la puerta principal de la casa había una capa de cal. Pedro Pañart se subió a una escala de mano que descansaba sobre las puertas de la casa de D. Joaquín Fernández, vecino de la villa, levantó una capa de cal que en su frontera se advertía puesta de poco tiempo, bajo la cual había una piedra tosca de media vara en cuadro en la que se hallaba grabado un escudo de armas que contenía una encina, una torre, un morreón y unos cordones con algunos otros adornos. Todo lo ha picado dicho Pañart hasta tanto no ha quedado resquicio alguno de dicho escudo de armas, ni señal de haberlas habido, hallándose a todo presente el Sr. Juez de Comisión y otras gentes. Los gastos necesarios para la inspección de las fachadas y borrado del escudo los debía pagar el demandado, en este caso lo pagó Teresa Abad, esposa del ausente Joaquín Fernández. Fueron 32 pesetas que en aquellos tiempos suponían una apreciable cantidad de dinero. Los afectados, además de eliminar el escudo de su fachada, tuvieron que costear los gastos del proceso.


La pregunta que surge es porqué Juan Buerba tenía tanto interés en hacer desaparecer los escudos de los vecinos de Bielsa. Parece ser que había una enemistad manifiesta. El ayuntamiento de Bielsa le había negado el reconocimiento de infanzón y de ahí que, en el año 1800, Juan tuviera que realizar un proceso ante la Real Audiencia de Aragón para demostrar documentalmente su condición de hidalgo, algo que le supuso un gasto importante de dinero. Juan Buerba se vengó de ellos, les pagó con la misma moneda, obligándoles a demostrar documentalmente su condición de infanzones, y en caso contrario a eliminar sus escudos.
Juan Buerba y su familia obtuvieron en la Real Audiencia de Aragón confirmación de su infanzonía y colocaron su escudo de armas en la fachada principal de su casa. En la villa de Bielsa no quedó en las fachadas un solo escudo de propiedad privada, aunque en la actualidad hay dos que son antiguos. Parece ser que sus propietarios los escondieron en los tiempos de persecución y con posterioridad los volvieron a colocar. Un ejemplo de ello es la piedra armera de casa Pellos.
Desde el s.XIV, por privilegio real, los vecinos y moradores de la villa de Bielsa gozaron de todos los derechos de los infanzones. Estos mismos derechos fueron reconocidos por la Real Audiencia de Aragón en los siglos XVII y primer tercio del XVIII. A principios del s.XIX nadie se acordaba de ello, o acaso estos derechos colectivos habían sido derogados.
Las enemistades y pleitos nunca son rentables. Los vecinos de Bielsa, propietarios de escudos, se quedaron sin ellos y con menos dinero. Juan Buerba ganó enemigos y perdió tiempo y dinero. Nosotros hemos perdido información y patrimonio cultural.



domingo, 20 de mayo de 2012

El linaje de los Arasanz


Casa Arasanz de La Pardina (Castejón de Sobrarbe)
1.   ORIGEN DEL APELLIDO.

En el año 1495 había en Sobrarbe diversas casas cuyo dueño llevaba el apellido Arasanz. En Muro de Roda eran cuatro las viviendas en las que el cabeza de familia era de este linaje. También en Mediano, Aínsa, Tierrantona y La Pardina de Castejón de Sobrarbe había representantes. Los lugares mencionados se ubican cerca del pueblo de Arasanz; allí debió de surgir el apellido. Posteriormente llegó la expansión del linaje, comenzando primero por los pueblos más cercanos.

2.   INFANZONÍA DE LOS ARASANZ.

En el año 1626 Bernard Arasanz, Gaspar Arasanz, Juan Arasanz (mayor) y Juan Arasanz (menor), vecinos de Arasanz, asistieron como infanzones a las Cortes celebradas en Barbastro. También acudieron Jordán de Arasanz, residente en Mediano, Juan Arasanz, de Montesa, Miguel Arasanz, de Laguarres y Sebastián Arasanz, mayor y menor, de Laguarres.

En 1733, Joseph y Carlos Arasanz, hermanos, presentaron ante el ayuntamiento de Mediano, Plampalacios y casas de Arasanz, un “procesillo ad futuram rei memoriam de la infanzonía de sus ascendentes testificado en 21-IV-1640 y por Pedro Giral, Notario Real habitante en la villa de Aínsa”.

En el año 1697 los Arasanz de Abizanda, Olsón y Montesa obtenían firma de infanzonía. En el documento  se especifica la evolución del linaje y su historia hasta la llegada a los tres pueblos mencionados:

Antón Arasanz (1º), infanzón y natural de Muro de Roda, fue a vivir a las Casas de La Torreta de Banastón y Gerbe, casando con Magdalena Solanilla. Fruto de este matrimonio nacieron Pedro, Antón y Juan Arasanz Solanilla (2º). Pedro Arasanz (2º), al casar con Magdalena Sanzatornil, fue a vivir a Plampalacios. Juan Arasanz Sanzatornil (3º), hijo de Pedro y Magdalena, contrajo matrimonio en el año 1656 con Anna Cosculluela, vecina de Olsón y viuda de Pedro La Pardina. Este matrimonio vivió en casa Pardina de Olsón y tuvo varios hijos: Juan, Domingo y Jusepe, éste último casó en Olsón con Catherina Buil. Juan Arasanz (4º) contrajo matrimonio con Jusepa Sanzatornil, de Abizanda.


3. EVOLUCIÓN DE LA RAMA DE CASA ARASANZ DE ABIZANDA.

En el año 1689 llegaban los Arasanz a la casa que en la actualidad es conocida como Arasanz de Abizanda; Juan Arasanz Cosculluela, vecino de Olsón, casaba con Josefa Sanzatornil Barbanox. Este matrimonio tuvo al menos cuatro hijos: Juan, Domingo, Miguel y Pedro. Juan Arasanz Sanzatornil fue el heredero y contrajo matrimonio con Isabelana Barbanox, de las casas de La Barca. Domingo Arasanz marchó a vivir a Olsón ya que casó con Cecilia Falceto. Miguel Arasanz comenzó nueva vida en La Sosa, cerca de Naval, y contrajo matrimonio con María Antonia Abizanda. Pedro Arasanz enlazó con María Sánchez y acabó dando nombre a la actual casa Pedrasanz (Pedro Arasanz) de Abizanda. En casa Arasanz de Abizanda y en casa Pedrasanz se mantuvo el apellido hasta la segunda mitad del siglo XIX. Desde casa Pedrasanz el linaje se extendió, entre otros lugares, a Mediano, Trillo (año 1774) y El Coscollar de Sarsa de Surta (1793).
4. LOS ARASANZ DE LAMATA Y SU POSTERIOR EXPANSIÓN.

Este apellido llegó a Lamata en torno al año 1725 y dio nombre a la actual casa Arasanz. De momento no he podido saber el pueblo de procedencia. Su línea principal es la siguiente:
En el año 1757 se documentan los Arasanz en Suelves puesto que Joseph Arasanz Olibar, vecino de Lamata, contrajo matrimonio con Rosa Romeo, de Suelves.

En 1856 Antonio Arasanz Arcas casó con María Olibera y fue a vivir al lugar de Arasanz.

En 1872 José Arasanz Arcas contrajo matrimonio con Josefa Oncis, vecina de Palo.
5. LOS ARASANZ EN “TIERRA BUCHO”.

La primera mención que he encontrado se remonta a 1733. En ése año el concejo de Arcusa y Castellazo hacía constar que Faustino Arasanz, vecino de Castellazo, era tenido por infanzón. En Castellazo existe una casa llamada Arasanz, pero no la tengo estudiada y desconozco la procedencia del apellido.

En Almazorre se documenta la existencia del apellido en el siglo XX: en los años cuarenta Vicente Arasanz Pocino vivía en casa Escalera. No era la primera vez que llegaba el apellido a este pueblo puesto que en el año 1761 María Juste, de la actual casa Pardina, contrajo matrimonio con Francisco Arasanz, nacido en casa Falceto de Olsón. En 1791 casaba María Arasanz Juste con Juan Pardina Falceto, de Olsón, con lo que acababa la historia de los Arasanz en casa Pardina.

En el siglo XIX, desde casa Coronas de El Coscollar, el apellido se expandió por los pueblos próximos y llegó a casa Cavero de Erípol y casa Rufas de Paúles de Sarsa. En Arcusa hubo dos casas con este apellido, entre ellas Giral. Provenían de casa Coronas de El Coscollar y casa Rufas de Paúles.

5.1 CASA CORONAS DE EL COSCOLLAR Y CASA RUFAS DE PAÚLES.

En el año 1793 contraían matrimonio Domingo Arasanz Bardaxí, de casa Pedrasán de Abizanda, y Mª Rosa Buil Vallés, vecina de El Coscollar de Sarsa de Surta. A continuación se especifica la evolución del linaje a partir de este matrimonio:

5.2 CASA CARRUESCO DE LECINA.

A casa Carruesco de Lecina llegó el linaje de los Arasanz en 1821; en dicho año se celebró el matrimonio entre Ramona Carruesco Mora y Victoriano Arasanz Cosculluela, vecino de Mediano, su padre nacido en casa Pedrasanz de Abizanda. Prueba de la importancia de la casa es la dote que trajo dicho Victoriano: 500 libras jaquesas. Según D. Damián Peñart y Peñart, los herederos de Casa Carruesco con apellido Arasanz han sido los siguientes:
6. LOS ARASANZ EN LA PARDINA DE CASTEJÓN DE SOBRARBE.

Existe en este pueblo una casa que desde tiempo inmemorial es conocida con el nombre de Arasanz. Se trata de un edificio que tiene planta baja y dos pisos. Posee dos puertas de entrada; la más antigua, sita en la fachada oeste, abre en arco de medio punto, con dovelas muy grandes y algo erosionadas. Está defendida por un vetusto matacán de reducidas dimensiones que se sitúa en la falsa. En la planta baja conserva cuatro bellas bóvedas de sólida construcción; una de estas estancias, que antiguamente fue utilizada como cuadra, aún posee los viejos comederos realizados en piedra. En el siglo XX la casa sufrió los avatares de los nuevos tiempos y fue reedificada en la parte dedicada a vivienda y en la falsa. Parece ser que antiguamente poseyó mayores dimensiones que en la actualidad. Tuvo escudo en su fachada este, pero al hacer las obras fue sacado y no se volvió a colocar; eran otros tiempos en los que primaba lo práctico y no se valoraba lo antiguo e histórico. Se desconoce el paradero de este escudo.

En los años 1495, 1571 y 1602 el propietario del casal se llamaba Pedro Arasanz. En 1647 lo era Juan Bautista Arasanz, y en 1863 y 1920 Manuel Arasanz.

En La Pardina, en el último tercio del siglo XIX, llegó el apellido Arasanz a casa Buil procedente de casa Olibera de Arasanz. En el siglo XX, un hermano del heredero de casa Buil contrajo matrimonio y fijó su residencia en la cercana casa Bellosta.

7. ESCUDOS DE LOS ARASANZ.

Según D. Justo Soro, el escudo que hubo en casa Arasanz de La Pardina era, aproximadamente, de la siguiente manera: “cortado; en el campo superior, de color azul, una cruz de gules que aludiría a la cruz de Sobrarbe. En el campo inferior, plateado, tres cacerolas u ollitas colocadas a modo de los vértices de un triángulo; harían referencia a la hospitalidad de la casa y a la misericordia que en ella se tenía con los pobres. En el extremo inferior del escudo, en un espacio con forma de abanico, las barras de Aragón”.

En casa Pardina de Almazorre hay un escudo fechado en el año 1771. En julio del año 2003 fui a verlo.

Escudo en casa Pardina de Almazorre

Me pareció que estaba incompleto en su zona superior; posiblemente la piedra se rompió hace muchos años al ser cambiada de emplazamiento; el trozo pequeño se debió tirar. Este escudo es “partido y cortado, con dos rostros en los cuarteles en jefe y tres palos en la punta”.

Teniendo en cuenta que el linaje de los Pardina llega en 1791 se deduce que el escudo es de otro apellido. Los Arasanz se documentan en la casa a partir de 1761, puesto que ese es el año en que María Juste contrajo matrimonio con Francisco Arasanz. Por tanto, todo apunta a que el escudo pertenece al linaje de los Arasanz.

Los rostros humanos esculpidos también gozaron de mucha devoción en casa Arasanz de Lamata: una ventana, fechada en 1793, presenta caras en relieve al pie de las jambas, rostro en el alféizar y en el dintel huecorrelieve conchiforme. Dentro de la vivienda, adornando la escalera, hay un rostro. También en el pozo, situado en frente de la casa, existe una cara humana por cuya boca brota el agua de la pila. Todo lo dicho induce a pensar en una posible relación de esta casa con casa Pardina de Almazorre. Esperemos que algún día los documentos históricos nos puedan confirmar o desmentir esta suposición.

Lo que sí está claro es que el blasón de casa Pardina no pertenece al apellido Pardina puesto que Los Pardina de Almazorre descienden de Olsón y el escudo de su linaje presenta cuatro cuarteles: “Arriba a la izquierda, en campo azul, un palacio con tres torres; arriba a la derecha, en campo azul, una carrasca cimada con una cruz roja y a los pies del árbol un león. Abajo a la izquierda, en campo plateado, tres cipreses, puerta y una espada en medio de unas armas; abajo, a la derecha, cuatro barras de Aragón coloradas”.

8.

El apellido Arasanz está bastante extendido por la mitad sur de Sobrarbe. Hay casas llamadas Arasanz en Abizanda, La Pardina, Lamata y Castellazo. Son multitud las viviendas en las que en una u otra época su propietario llevó este apellido. Por lo general fueron familias acomodadas, incluso de las de mayor nivel económico de Sobrarbe meridional. Todas las personas de la comarca que en la actualidad se apellidan Arasanz tienen relaciones de parentesco más o menos lejanas.

jueves, 10 de mayo de 2012

Jaime Cid de Nerín, notario



Año 1618. Signo de Jaime Cid de Nerín, natural y habitante en la villa de Boltaña, por autoridad Real notario público por todas las tierras, reinos y señoríos del Rey Don Felipe.

jueves, 3 de mayo de 2012

Piedra armera de los Lascorz en casa Notario de Labuerda.


Este blasón se puede ver en la fachada principal de casa Notario de Labuerda y pertenece al linaje de los Lascorz. Es cuartelado en cruz; en cantón diestro en jefe: ballesta acostada por dos flechas dispuestas en cabrio; en cantón siniestro: dos cabezas dispuestas en barra adiestradas por un puñal; en cantón diestro en punta: castillo; en siniestro: encina cimada por una cruz; timbre de hidalguía empenachado y lambrequines de hojas en forma de tornapuntas. Siglo XVIII. Esta piedra armera es una derivación de otros escudos previos del linaje.